domingo, 12 de agosto de 2012

"Diario de guerra: martes por la noche", de Miklós Radnóti





(En preparación, por Carlos Morales)


Miklós Radnóti 
Martes por la noche
(Diario de guerra)

 
 
Ahora duermo en paz
y lentamente hago mi trabajo ––
el gas, los aviones, las bombas, están listos contra mí.
Yo no puedo tener miedo, ni llorar;
vivo con la dureza de esos constructores de caminos
que, entre las frías montañas,
si su frágil casa
se hunde sobre ellos de tan vieja,
levantan otra nueva y, mientras tanto,
duermen profundamente sobre limaduras de madera perfumada
y salpican sus rostros al comenzar el día
en los fríos y brillantes riachuelos.

*

Yo vivo en lo alto, y contemplo lo que me rodea:
la oscuridad no deja de crecer.
Y como desde la proa de un barco
cuando el relámpago estalla
grita el centinela y dice estar viendo la tierra,
así también aquí, sobre esta tierra, grito ¡vida!
con una luminosa voz.
Y el sonido de mi voz resplandeciente
se aleja
hacia una estrella fría
arrastrado por el viento fresco de la noche.
 
 
2. Tuesday Evening

Now I sleep peacefully
and slowly go about my work—
gas, airplanes, bombs are poised against me,
I can neither be afraid, nor cry;
so I live hard, like the road builders
among the cold mountains,
who, if their flimsy house
crumbles over them with age,
put up a new one, and meanwhile
sleep deeply on fragrant wood shavings,
and in the morning, splash their faces
in the cold and shining streams.

*

I live high up, and peer around:
it is getting darker.
As when from a ship's prow
at the flash of lightning
the watchman cries out, thinking he sees land,
so I believe in the land also—and still I cry out ¡life!
with a whitened voice.
 And the sound of my voice brightens
and is carried far away
with a cool star and a cool evening wind.
 
 
 
 
     Esta versión inglesa ha sido obtenida partiendo del original en húngaro por la poeta norteamericana Lucy Helen Boling, que trabaja como traductora para varias revistas de Budapest. Fue recogida por el también poeta estadounidense Michael R. Burch en un amplísimo trabajo dedicado a la vida y la obra del poeta magiar titulado “Miclós Radnóti: Witness to horror, Champion of Empathy”, que apareció publicado en la prestigiosa revista on line  WWW. The Hipertext.com.
 

Grandes Obras de
El Toro de Barro
PVP: 10 euros Pedidos a:
edicioneseltorodebarro@yahoo.es

 
En un dramático–y real– camino de retorno, algunos de los 130 niños que sobrevivieron a Auschwitz viajaron de nuevo al escenario de aquel apocalipsis con un grupo de estudiantes israelíes de secundaria, en el que se encontraban sus hijas. El encontronazo de dos generaciones distintas con aquella memoria de dolor provocó una gigantesca catarsis individual y colectiva, cuya historia fue narrada por la psicóloga infantil Amela Einat en La cicatriz del humo, Esta novela coral pone de manifiesto las diversas formas de experimentar la presencia real de aquella tragedia en todas las generaciones del Israel contemporáneo, de cuyas patologías Amela Einat es una reputada e innovadora especialista




"El Profeta", de Carlos Morales. De su Libro "S". Ilustración Leonardo da Vinci









«Camino por Theresienstadt», de Ilse Weber



Llegada al "campo de lujo" de Theresienstadt



(En preparación, por Carlos Morales)

Camino por Theresienstadt



Camino perdida por Theresienstadt,
con el corazón rebosante de plomo,
hasta que abruptamente mi paso se detiene
cerca del bastión.
Ahí me quedo, paralizada en el puente,
y miro hacia el valle:
¡Cuánto me gustaría seguir caminando,
y poder volver  de nuevo al hogar!
Mi hogar! –tú, maravillosa palabra,
ni corazón ahogas por completo,
te llevaron lejos,
nada tengo ya.
Doliente y apagada doy vueltas y vueltas,
oh, cuánto me pesa el infinito girar:
Theresienstadt, Theresienstadt,
¿cuándo cesará el dolor,
cuándo seremos libres de nuevo?



"Canción de cuna de Thersienstadt"   *   ”A casa"

"Adios, compañero"   *   "Wiegala, wiegala, weier"



 


Grandes Obras de
El Toro de Barro
PVP: 10 euros Pedidos a:
edicioneseltorodebarro@yahoo.es

 
En un dramático–y real– camino de retorno, algunos de los 130 niños que sobrevivieron a Auschwitz vijaron de nuevo al escenario de aquel apocalipsis con un grupo de estudiantes israelíes de secundaria, en el que se encontraban sus hijas. El encontronazo de dos generaciones distintas con aquella memoria de dolor provocó una gigantesca catarsis individual y colectiva, cuya historia fue narrada por la psicóloga infantil Amela Einat en La cicatriz del humo, Esta novela coral pone de manifiesto las diversas formas de experimentar la presencia real de aquella tragedia en todas las generaciones del Israel contemporáneo, de cuyas patologías Amela Einat es una reputada e innovadora especialista




"El Profeta", de Carlos Morales. De su Libro "S". Ilustración Leonardo da Vinci